Chema Mansilla
Editor - Cine y TVSi has empezado a ver Lord of Mysteries, seguramente te han pasado al menos dos de estas tres cosas: la primera, que no hayas entendido nada al principio. Luego puede ser que, o bien estés enganchado a su estética steampunk, a su sistema de magia o a su espectacular acción, o bien que hayas decidido que no es para ti. Lo primero, creo, nos pasa a todos, porque este universo fantástico es apabullante y el anime no hace concesiones a la hora de lanzarnos a una trama muy compleja. Si eres de los que se ha enganchado, estoy contigo. Si eres de los que logró enamorarse de esta propuesta, tal vez pueda convencerte de darle una segunda oportunidad, especialmente si eres fan de Brandon Sanderson y Nacidos de la Bruma.
Lord of Mysteries: un universo de intriga y ocultismo
Lord of Mysteries es un donghua chino basado en la popular novela web homónima de Cuttlefish That Loves Diving. La serie se estrenó el 28 de junio con dos episodios de 35 minutos cada uno, cubriendo más de 40 capítulos del material original en un arranque vertiginoso. Ambientada en un mundo victoriano steampunk, la historia combina trenes de carbón, calles llenas de niebla, rituales ocultos y un sistema de magia inspirado en el tarot y la tradición hermética de los rosacruces. Su protagonista, Klein Moretti, despierta sin recuerdos en una ciudad llena de secretos y sociedades secretas, enfrentándose a un mundo letal donde la intriga y el peligro acechan en cada esquina.
El estilo visual de la serie ha sido uno de los elementos más alabados. Con fondos 3D muy detallados, un estupendo diseño de personajes y una acción desbordante, cada episodio mantiene un ritmo cinematográfico que hace que incluso quienes desconocemos la novela original nos sintamos atraídos por su atmósfera oscura y fascinante. En mi caso, y a pesar de no entender nada al principio, como os decía, lo que hizo me quedara atrapado es que me recordó a Nacidos de la Bruma, el primer libro de Sanderson que leí. En ese primer momento pensaba que era algo que tenía que ver con su estética, pero en realidad tiene más que ver con su inteligente planteamiento y reinvención de la magia.
Ambientación steampunk decadente
Tanto Lord of Mysteries como la segunda era de Nacidos de la Bruma (Mistborn) comparten un enfoque fascinante sobre la tecnología industrial y lo sobrenatural. En el donghua, la estética victoriana de vapor impregna cada calle, con trenes de carbón que atraviesan ciudades densamente pobladas y rituales místicos escondidos tras fachadas aparentemente normales. Por su parte, la segunda era de Mistborn de Brandon Sanderson nos muestra un mundo donde ferrocarriles, el uso incipiente de la electricidad y fábricas cubiertas de ceniza conviven con habilidades mágicas.
En ambos universos, la tecnología industrial no reemplaza lo sobrenatural, sino que coexiste con él
En ambos universos, la tecnología industrial no reemplaza lo sobrenatural, sino que coexiste con él, creando escenarios donde el avance humano y lo arcano se entrelazan de manera convincente. Este contraste potencia la sensación de decadencia y maravilla, ofreciendo a los espectadores una experiencia visual y narrativa que es al mismo tiempo moderna y atemporal. Pero creo que lo que hace especial tanto a la obra de Sanderson como a Lord of Mysteries es que las dos obras presentan un trabajo e inteligente juego de reglas para su magia, un sistema en el que las cosas no funcionan porque sí, por muy paranormales que sean.
La magia como sistema
En Mistborn, la magia está profundamente ligada a la lógica y a la química, con la Alomancia permitiendo a los personajes quemar las sustancias metálicas de su sangre para activar efectos físicos predecibles. La filosofía detrás de este sistema es coherente y científica: cada metal produce un efecto específico, y el usuario debe entrenarse para dominarlo. En Lord of Mysteries, la magia se basa en la mezcla de tarot, rosacrucianismo y rituales místicos. Las "voces" que Klein puede escuchar dependen de combinaciones de pociones, símbolos y ceremonias, un enfoque más esotérico y ocultista que la rigurosa estructura de los poderes Alománticos. Sin embargo, ambos sistemas comparten una característica crucial: la magia no es gratuita; cada uso tiene un precio.
Ambos universos subrayan que la magia es una herramienta poderosa, pero siempre con un coste
La Alomancia de Mistborn permite a los personajes realizar hazañas extraordinarias: empujar o atraer metales, aumentar la fuerza o los sentidos, e incluso predecir futuros cercanos. La clave está en entender las reglas de cada metal y aplicar estrategias para combinarlos. En Lord of Mysteries, los efectos mágicos surgen de rituales complejos, combinaciones de tarot y manipulación de energías ocultas. Klein debe aprender a interpretar símbolos y signos para controlar los poderes que recibe, con un aprendizaje mucho más intuitivo y peligroso que el de los Mistborn.
Pero el poder tiene un precio: para los personajes de Sanderson quemar metales en exceso causa fatiga, daño a órganos y puede llevar a la dependencia. La magia de Klein, por su parte, genera desgaste mental, arriesga la locura y permite la posesión por entidades externas. Ambos universos subrayan que la magia es una herramienta poderosa, pero siempre con un coste que los protagonistas deben medir cuidadosamente.
Conspiraciones y sociedades secretas
Hay más paralelismo interesante: Los mundos de Sanderson y Cuttlefish están poblados por organizaciones que operan en las sombras. En Lord of Mysteries, sectas como La Bruma y la Escuela Teísta compiten por el control de rituales y reliquias mágicas. En Mistborn, los rebeldes alománticos, los Inquisidores y redes de espionaje luchan por la libertad de los skaa y la preservación del poder. Estos entramados sociales y políticos proporcionan giros narrativos constantes y una sensación de peligro latente, haciendo que cada victoria tenga un precio y cada secreto pueda cambiar el equilibrio del poder.
Estos dos universos exploran la fragilidad de los imperios y el precio del conocimiento
Estos dos universos exploran la fragilidad de los imperios y el precio del conocimiento. La tiranía del Lord Legislador en Mistborn se refleja en la manipulación moral de los poderes ocultos en Lord of Mysteries. La lucha por el poder, la corrupción y la búsqueda de redención son motores narrativos que conectan con los espectadores, recordando que incluso en mundos fantásticos, las decisiones éticas y la ambición tienen consecuencias tangibles. De ahí que mi comparación entre Mistborn y Lord of Mysteries no me parezca casual. Ambos presentan mundos industriales donde la magia se trata como ciencia y el rito y la tradición mágica, protagonizados por personajes que evolucionan enfrentando dilemas éticos, conspiraciones y costes personales. Si mezclas todas estas cosas, el resultado hace que ambos universos sean fascinantes y absorbentes, cada uno con sus pequeñas particularidades.
Si eres fan de Brandon Sanderson, ver Lord of Mysteries puede resultar especialmente interesante, ya que tienen muchos puntos en común. Pero las dos historias están tan separadas en el modo de presentar ciertas ideas similares que resulta curioso ver ese paralelismo tan evidente. El planteamiento occidental de Sanderson ha resultado una fórmula de éxito, y creo que la revisión oriental de Lord of Mysteries de este tipo de elementos que le son tan lejanos culturalmente es muy atractiva. Su combinación de acción, intriga y magia inteligente lo coloca entre los mejores estrenos del año, y aunque su inicio puede parecer abrumador, cada episodio recompensa la atención con un universo coherente y visualmente impresionante.
Tampoco puedo obviar el hecho de que el estreno de Lord of Mysteries ha resultado divisivo entre los aficionados, y no es difícil entender por qué. Por un lado, muchos elogian la ambición del anime: su fidelidad al material original, la riqueza de su universo steampunk y la complejidad de sus sistemas de magia han capturado a quienes buscan una experiencia profunda y envolvente. Sin embargo, para otros, la densidad narrativa y la velocidad con la que se introducen conceptos, misticismo, sociedades secretas y rituales resulta abrumadora, creando la sensación de que es demasiada información para digerir de golpe.
El estreno de Lord of Mysteries está generando comparaciones inevitables con el fenómeno de Solo Leveling debido a su origen como anime no japonés, y que se ha convertido en la tercera serie más valorada de la plataforma Crunchyroll. Muchos aficionados están comparando el nivel técnico de ambas series, desde la fidelidad de la animación al arte original hasta la manera de mostrar la acción y el desarrollo de los personajes. Sin embargo, si bien las dos son sobresaliente, en lo personal considero que el nivel técnico y la espectacularidad visual de Lord of Mysteries superan ampliamente a Solo Leveling. Pero eso es cosa mía. No pierdas más tiempo: puedes ver Lord of Mysteries en Crunchyroll y sumergirte en este mundo de magia oscura.
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