José A. Mateo Albuerne
Jefe de ActualidadLa asunción de que jóvenes y videojuegos es una combinación ideal, como si de jamón y queso se tratase, hace tiempo que ya no es tan cierta. Al menos eso es lo que extraemos del estudio publicado en redes sociales hace cosa de un mes por Mat Piscatella, analista de Circana, que pone sobre la mesa unos datos preocupantes tanto para la industria del videojuego como para la totalidad de la Generación Z.
Ya no estamos hablando de que los juegos free to play como Fortnite o League of Legends se estén llevando una gran parte del tiempo de ocio de toda una generación de fans del videojuego, es que lo que cuenta Piscatella va más allá y se centra específicamente en el gasto de la juventud en lo que a este ocio digital se refiere. Mientras para el grueso de los grupos de edad el gasto en videojuegos ha bajado un par de puntos porcentuales en el último año, para la Generación Z este número se va hasta cerca de un 25% menos.
El informe de Piscatella está centrado en Estados Unidos, donde la juventud tiene problemas añadidos como los ingentes gastos universitarios, pero parece evidente que se puede trasladar a todo el planeta, con unas condiciones económicas que golpean con fuerza a una Generación Z con problemas para asentarse en el mercado laboral y con una inflación rampante que hace más daño a quien menos dinero gana. "Llevo hablando de este problema durante más de un año. Entre nuevos juegos y comida, la gente (normal) elegirá comprar comida", insistió el analista recientemente.
"Entre nuevos juegos y comida, la gente (normal) elegirá comprar comida"
La situación no se va a resolver pronto, y por muchos motivos. Esta ha sido la primera generación en la que las consolas suben de precio en lugar de bajar, y es una tendencia que se reforzará a futuro como demuestra el caso acaecido en Estados Unidos con Nintendo Switch, así como se esperan subidas en el precio mismo de los videojuegos.
Si venimos a España, estudios recientes sitúan la pérdida de poder adquisitivo de los jóvenes de menos de 35 años en un 8% sólo en el último año, mientras la riqueza neta de los jóvenes en los últimos 20 años bajó cerca de un 50%, según datos de El Economista. Además en cuanto al ocio, fuentes como Cadena Ser hablan de la tendencia a viajar como actividad de ocio preferida entre la juventud, aumentando las financiaciones.
Se priorizan experiencias puntuales como vacaciones, conciertos o festivales, frente clásicos de otras generaciones como el consumo de alcohol o tabaco. El salir de fiesta tradicional se realiza ocho veces menos, y el tabaquismo entre los jóvenes de 15-24 años, la tasa bajó de un 40% a un 14% desde 1995. A pesar de esos cambios de hábitos, la capacidad de ahorro de la generación ha descendido notablemente y cosas como disponer del dinero necesario para una entrada de un piso es una utopía para muchos. Los videojuegos y su descenso en el consumo de los más jóvenes son sólo una pista.
Foto de Erik Mclean para Unsplash.
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