José A. Mateo Albuerne
Jefe de ActualidadEn absoluto estamos hablando del juego más oscuro de Rockstar, porque es tan conocido como los demás, y tampoco el más inaccesible, porque puede ser comprado en tiendas digitales como Steam o la Xbox Store, así como de segunda mano en varios establecimientos para consolas de la época. Y, aún así, creo que no estaríamos diciendo una barbaridad si afirmamos que Grand Theft Auto IV es el menos querido de la saga. O mejor dicho, es el que goza de menos cariño en general.
Es real la sensación de que se trata de una edición a medio camino entre la nostalgia desenfrenada que consiguen títulos como San Andreas o Vice City, y las posibilidades jugables de GTA V. Por un lado, todos los que jugamos GTA IV en su día recordamos personajes concretos o encargos como el de las ratas con alas, y por otro es innegable la importancia del salto técnico dado por Rockstar con el juego, evidenciado en el motor de físicas que dotó de vida a la aventura de Niko Bellic y engendró las misiones de Liberty City. Sin embargo, la realidad es palpable y notoria.
Tanto es así que hasta la propia Rockstar trajo de vuelta (inicialmente con un tratamiento mejorable, ahora con uno mucho más adecuado) a GTA 3, Vice City y San Andreas con la Trilogy, o trajo de vuelta Red Dead Redemption para consolas actuales, pero ni rastro de la cuarta entrega numerada de Grand Theft Auto. Ninguna empresa de videojuegos es una hermanita de la caridad, y si no se ha hecho una nueva versión de GTA IV es porque no ven a una cantidad interesante de jugadores dispuestos a pasar por caja por ella.
"Demasiado serio, demasiado oscuro y casi depresivo"
Incluso desarrolladores de la propia compañía tienen una relación complicada con la aventura de Niko Bellic. Obbe Vermeij, el que fuera director técnico de Rockstar North desde 1995 a 2009, considera que "es un juegazo" y que "GTA IV debería remasterizarse". Pero, de igual manera, fue el título que le motivó (junto con otros asuntos como volver a Canadá) a marcharse de la empresa al considerar que era "un poco demasiado serio, demasiado oscuro y casi depresivo".
Grises, marrones y ocres por doquier.
Más allá de las posibilidades que tiene un mapeado u otro, las misiones de GTA IV no son muy distintas a las de GTA V gracias al uso de su motor de físicas junto con esa primera gran iteración del RAGE, el motor gráfico del estudio, y el gusto por lo cinematográfico que permea a toda la saga también estaba en Liberty City. Quizás la clave está en una de las cosas que dice Vermeij y que es la palabra "depresivo".
"Siempre intentamos que el tono de la historia y el tono de los gráficos encajen a la perfección"
El tono del juego, matizado en las apreciadísimas expansiones, sí que era distinto a los juegos anteriores. Las historietas de criminales daban paso a un inmigrante de Europa del Este que se abría paso en una Tierra de las Oportunidades que sólo le recompensa cuanto más despiadado y violento es. Dan Houser, fundador de Rockstar y uno de los máximos responsables del desarrollo de este juego, fue entrevistado en The Telegraph unas semanas después del lanzamiento del mismo y habló de este cambio de tono frente a San Andreas o Vice City.
"Siempre intentamos que el tono de la historia y el tono de los gráficos encajen a la perfección. Intentamos crear un mundo que parezca real. Los gráficos antiguos eran mucho más caricaturescos porque era lo único que podíamos hacer, por lo que la historia y el guion también tenían que serlo. Todo es cuestión de tono. Nuestro objetivo es que sea coherente. El juego en su conjunto debe parecer un todo en el que todo está equilibrado y todas las partes son igual de buenas", explicó Houser en dicha entrevista.
El color no será un problema en GTA 6.
Ese tono permeaba a la historia, pero también era una decisión estética. La generación de Xbox 360 y PlayStation 3 se conoce como la era gris del videojuego, y la razón es la popularidad de un Unreal Engine 3 que trabajaba una gama de colores y un tratamiento de la iluminación que variaba desde el marrón ocre al verde mostaza. Esto es paradójico, porque precisamente GTA IV usaba otro motor gráfico, pero bien podríamos asociar este título a dicha tendencia.
El tono oscuro de la Liberty City de Niko Bellic es algo que no llegó a convencer a muchos fans
Más allá de las modificaciones que mejoran el rendimiento en PC y un aspecto puramente técnico como la resolución de las texturas, el tercer mod más descargado para GTA IV en Nexusmods no es otro que iCEnhancer 3.0 Natural. En palabras de su creador, "Este mod tiene como objetivo hacer que GTA IV sea más natural, menos oscuro y más vibrante". Queda claro que este tono oscuro y apesadumbrado de la Liberty City de Niko Bellic es algo que no llegó a convencer a una importante cantidad de jugadores.
El propio Vermeij llegó a pensar que ese sería el futuro de Rockstar, el de hacer videojuegos sombríos, muy serios. Como él mismo admitió, se equivocó, y GTA V fue un giro hacia la comedia más que evidente, representado además con una nueva paleta de colores. Con Grand Theft Auto 6 podemos esperar una importante relación sentimental entre Jason y Lucía, los protagonistas, y toda la crítica social esperable de una sátira de la América post Trump ambientada, nada menos, que en un trasunto de la siempre alocada Florida.
Pero si había dudas sobre el tono general, bastan los dos tráilers como muestra de que Rockstar puede estar orgullosa de lo que supuso GTA IV, pero que el camino que ha emprendido hará que la sexta entrega numerada sea una que tenga un tono y unos colores muy distintos a lo que la Liberty City de Nico Bellic nos trajo a nuestras consolas en 2008.
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