Adrián Mira
EditorDesarrollar un título como STALKER 2: Heart of Chornobyl ya suponía un reto enorme por su ambición, pero la dificultad se multiplicó para GSC Game World cuando tuvieron que trabajar en plena guerra entre Rusia y Ucrania. El estudio ucraniano ha logrado sacar adelante un proyecto que no solo es un gran juego sino que también es un símbolo de resistencia y que sigue mejorando con cada actualización desde su lanzamiento del año pasado.
El shooter postapocalíptico de STALKER 2 todavía tiene mucho que mejorar de cara a los próximos meses, tanto en parches importantes como en expansiones que están en camino. Hace unos días publicamos que STALKER 2 abandonaba Xbox Game Pass en fechas muy cercana a su lanzamiento en PS5, y de paso aprovecharon para lanzar el parche 1.7 que añade el sistema de control territorial de las facciones, incluye la dificultad 'Ultra-Difícil', corrige más de 90 errores, y mejora el rendimiento y aspectos de misiones principales, junto a optimizaciones en la IA, anomalías y más ajustes.
En una entrevista con el medio Eurogamer, el responsable de comunicación Zackar Bocharov ha explicado que el objetivo principal de la versión de PS5 era aprovechar al máximo las funciones del DualSense para aumentar la inmersión a través de los gatillos adaptativos y la vibración háptica para "sentir la Zona" y notar que las anomalías se acercan. Es un port más que redondo, aunque todavía queda mucho por trabajar en todas las versiones, pero será bastante difícil por el contexto bélico en el que se encuentra parte del equipo de GSC Game World.
Lo difícil que fue llevar STALKER 2 a PS5
Bocharov ha hablado acerca de lo complicado que ha sido llevar STALKER 2 a PS5 cuando la mitad del estudio GSC Game World se encuentra en Ucrania. "Ambos equipos con los que estoy trabajando para la versión de PS5 y el soporte de mods están en Ucrania. Están haciendo el mejor trabajo posible, incluso en esta situación, están entregando grandes resultados. La mayoría de los desafíos están relacionados con la guerra. Por ejemplo, los cortes de electricidad", menciona el miembro de GSC Game World.
"Nos adaptamos a la situación para intentar hacer algo. Tenemos muchas baterías externas, muchas estaciones de energía grandes con gran suministro. Tuvimos que hacerlo y por supuesto usamos Starlink para proporcionar conexiones a Internet al personal de vez en cuando". Otro de los problemas que enfrenta GSC Game World es cuando tiene que enviar kits de desarrollo de PS5 a una ciudad que suele ser bombardeada. "Los pedimos a nuestra oficina en Praga, y luego los enviamos a Kiev".
"Eso conlleva un riesgo adicional. Por ejemplo, quizás sabes que algunos de los centros de distribución y oficinas de correos también son objetivos. Así que estamos arriesgando la pérdida de nuestro equipo debido a estos ataques. No diría que fue estresante, diría que fue bastante desafiante y realmente interesante. Es una nueva plataforma, un nuevo sistema. Nuestro objetivo principal sigue siendo el de proporcionar la mejor experiencia posible a nuestros jugadores", cuenta.
"Está la guerra en Ucrania. No es algo que debería estar pasando en ningún país del mundo civilizado, y los ucranianos están afrontando algo que no deberían tener que afrontar. La mayoría del equipo sigue en Ucrania, unos 230 están en Praga y alrededor de 280 en Ucrania. La parte difícil fue trabajar entre las dos oficinas. Al final lo conseguimos, y aún lo estamos gestionando, pero no es normal. Para el momento del lanzamiento todos estaban extremadamente cansados, pero ya no había manera de retrasar el juego".
"Lanzamos el juego en tiempos de guerra. Lo terminamos, y ahora lo estamos actualizando y trabajando en DLC. Hubo un cambio para trabajar en varios proyectos en paralelo: soporte postlanzamiento, DLC y algo más. Eso requirió una cierta restructuración del equipo". Tras haber vendido más de un millón de copias y haber sumado más de 6 millones de jugadores en Game Pass, Bocharov señala que "es un éxito evidente, pero no podemos parar".
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