Chema Mansilla
Editor - Cine y TVComo os explicaba hace unos días en 3DJuegos, tengo más años que la arena de la playa y acabo de llegar al universo de Chainsaw Man, y me turboflipa. Ya sé que soy un señor mayor, pero sigo siendo fácilmente impresionable por la pirotécnica, los personajes con exceso de carisma y la chulería bien llevada. De todo eso va bien sobrada Chainsaw Man - La Película: Arco de Reze, la película que continúa la primera temporada del anime y que promete hacer saltar por los aires los ojos, cerebros y corazones de los aficionados que se asomen a los cines a verla.
La película deja claro que MAPPA Studios ha entendido la esencia del manga de Tatsuki Fujimoto y la ha llevado al límite. La historia retoma justo donde lo dejó la primera temporada, presentando a Denji atrapado entre su devoción por Makima y la nueva presencia eroticofestiva que sacude su mundo: Reze. Lo que parece un romance adolescente se convierte rápidamente en un terreno de traición, peligro y explosiones epectaculares, mezclando humor, drama y violencia en un cocktail audiovisual que deja poco respiro al espectador valiente.
Chainsaw Man: Arco de Reze adapta uno de los episodios más recordados del manga, abarcando los capítulos 39 al 52 y recogidos en los volúmenes 6 y 7. La película, dirigida por Tatsuya Yoshihara, director de acción de la primera temporada del anime, y escrita por Hiroshi Seko, se estrenó en Japón en septiembre de 2025 y llega a España el próximo 24 de octubre. Antes del estreno, MAPPA lanzó una campaña de reposiciones y maratones de la serie original, asegurándose de que tanto los fans consolidados como los recién llegados estuvieran listos para la experiencia.
MAPPA Studios ha entendido la esencia del manga de Tatsuki Fujimoto y la ha llevado al límite
La importancia de esta preparación no es meramente promocional: La película exige que el público llegue con un mínimo de contexto; no hay recapitulaciones extensas ni concesiones a la paciencia del espectador. MAPPA quiere que te sumerjas de inmediato, y lo consigue gracias a un ritmo que alterna delicadeza y brutalidad, ternura y gore, en una mezcla que refleja la esencia de la obra de Fujimoto.
Visceralidad audiovisual y montaje febril
La película despliega una puesta en escena que privilegia el impacto sensorial sobre la explicación pausada: te coje de una oreja y sin soltarte salta por la ventana mientras todo explota a tu alrededor y al gente grita cosas en japonés y los altavoces truenan con una banda sonora que es auténtica nitroglicerina. La animación es un auténtico ejercicio violencia cinética que convierten cada secuencia en un latido acelerado. La parte final de la película es prácticamente una agresión sensorial, ya os aviso. MAPPA ha demostrado que sabe jugar con la intensidad. La primera mitad de la película explora la incipiente relación entre Denji y Reze con colores saturados, escenas románticas y ritmo pausado.
La parte final de la película es prácticamente una agresión sensorial, ya os aviso
La segunda mitad, en cambio, se convierte en un torbellino de combates, cosas que saltan por los aires, saltos imposibles, artes marciales, explosiones y criaturas que desafían la física y el sentido común. Con todo, la animación no es perfecta: la mezcla de estilos 2D tradicional con CGI en ciertas secuencias deja mucho que desear, pero nos recuerda que no estamos ante un estudio occidental millonario ni un Ghibli que busca la perfección técnica absoluta, sino ante una obra que prioriza la emoción sobre la pulcritud visual y que lo da todo en su recta final.
Amor, dinamita y la lógica del delirio adolescente
Chainsaw Man: Arco de Reze concentra temas simples llevados al extremo: deseo, manipulación y la ingenuidad de Denji, un protagonista crudo y brutalmente honesto que solo ayuda si hay algo que ganar o si es engañado para creer que lo hay. Esta simplicidad moral permite que la película funcione como un sueño adolescente: el primer amor, las hormonas y presumiblemente el consumo de más latas de bebida energética de las acepta el Ministerio de Sanidad (que debido a su alto contenido de cafeína y azúcares recomienda no exceder los 160 miligramos de cafeína para evitar efectos adversos, lo que equivale a aproximadamente media lata de una bebida energética estándar con 32 mg de cafeína por cada 100 ml.)
La historia mezcla lo romántico con lo destructivo, la atracción con la traición, y el resultado es un relato que transforma la ingenuidad adolescente en catástrofe cinematográfica. Con todo, a mí me ha recordado a mi adolescencia, si bien afortunadamente yo no corría peligro de saltar por los aires. Pero sobre todo me ha hecho desear poder volver disfrutar de todo como lo hacía con 16 años, porque creo que todo era más intenso y de alguna manera, más real. No me quiero poner nostálgico, pero si esta peli me ha gustado con mi edad, si la veo con 16 me vuela la cabeza.
Decir que la película se parece a un delirante sueño adolescente no es casualidad. La cadencia y la intensidad recuerdan a un cerebro lleno de ideas febriles, con exaltación afectiva, lógica onírica y grotesco romántico mezclados sin pausa. Por otro lado, la sensación química que provoca tiene mucho subidón de azúcar. Esto convierte la experiencia en un tren bala de estímulos que no permite descanso, un vértigo emocional que mezcla adrenalina y ternura con la misma facilidad con la que Denji cambia de sonrisa a mueca de dolor. De propina, la banda sonora de Kensuke Ushio, con piezas como Typhoon Devil o la ya emblemática Iris Out, amplifica cada momento, haciendo que te pase media peli dando botes en la butaca.
Aviso para espectadores despistados
Para quien llega sin contexto, la película es un duro golpe doble. No hay concesiones a quienes no vienen con los deberes hechos de casa. Si no has visto el anime, que por cierto está en Crunchyroll, no te vas a enterar de nada. De nada, en serio. La película premia la entrega total y castiga a quien busque moderación, haciendo del visionado una experiencia no recomendable para aquel que no sepa lo que va a ver.
Si esta peli me ha gustado con mi edad, si la veo con 16 me vuela la cabeza
Los que han seguido el manga o la primera temporada encontrarán que Chainsaw Man: Arco de Reze amplifica todo lo que ya les gustaba: la interacción entre Denji y sus amigos, la irrupción de Reze en su vida y la violencia cinematográfica que define la saga. La combinación de romance, humor absurdo y acción desatada es una síntesis de todo lo que hace especial a Fujimoto: la mezcla de lo humano y lo monstruoso, de la inocencia y la carnicería.
La película es una vibrante obra de estética casi extrema, coherente con la sensibilidad del manga y formalmente audaz hasta el punto de provocar mareos si no te dejas llevar. No intenta agradar a todos; celebra el material original de manga con un estilo tan vertiginoso como delirante. MAPPA Studios ha logrado convertir un arco narrativo ya excelente en un espectáculo cinematográfico que se disfruta mejor en la gran pantalla, con unos buenos altavoces donde cada explosión se convierta en un impacto par ael espectador.
Para mí, la experiencia ha sido como volver a tener 16 años. O como os decía: desear volver a tener 16 años. La fascinación por estos personajes aberrantes, la adrenalina, la intensidad emocional de Denji… Todo hace que cada segundo de la película te haga sentir vivo y turbado a la vez. Chainsaw Man: Arco de Reze no es para cualquiera, insisto. Si no estás metido en harina, probablemente te sientas perdido; pero ningún fan del manga o del anime debería perdérsela.
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