Solo había visto algo así con Starfield, y ahora tengo más ganas. El RPG espacial sucesor de Mass Effect no le hace ascos al realismo

Dentro de los RPG más esperados de 2026, The Expanse: Osiris Reborn se ha colado fácilmente entre los diez primeros por dos motivos: representa la nueva expansión del videojuego de la saga The Expanse y su estudio, Owlcat Games, se ha consolidado como uno de los mejores estudios del momento. El estudio chipriota, con títulos a sus espaldas como Warhammer 40,000: Rogue Trader, llevará su experiencia en el rol por turnos a un concepto de rol y acción en tercera persona que, además, está siendo desarrollado en colaboración con un antiguo astronauta de la NASA, lo que permitirá equilibrar autenticidad científica y diversión jugable.

La compañía presentó recientemente un diario de desarrollo en el marco de los Golden Joystick Awards, donde mostró cómo Leroy Chiao, excomandante de la Estación Espacial Internacional, ha trabajado junto a Owlcat Games para asesorar sobre la vida y el trabajo en el espacio. Su conocimiento técnico ha permitido que los desafíos espaciales se sientan realistas sin convertirse en obstáculos frustrantes para los jugadores, y ha ayudado a introducir mecánicas plausibles, como la manipulación de objetos en gravedad cero.

En este contexto, una de las soluciones más llamativas del juego es la sustitución del clásico sistema de cuerdas o arneses que mantiene a los astronautas sujetos a la nave por botas magnéticas, lo que permite moverse libremente mientras se conserva la tensión de peligro que implicaría separarse del casco espacial. Este enfoque ofrece una experiencia inmersiva y dinámica, manteniendo la sensación de riesgo propia del trabajo fuera de la nave sin sacrificar la fluidez del juego.

The Expanse: Osiris Reborn y Starfield comparten realismo y ciencia ficción

Eso sí, Owlcat Games no es el único estudio que ha buscado colaboración con la NASA para aportar realismo a sus videojuegos, pero sí es el segundo que lo hace de cara a trabajar en un proyecto a medio camino entre el realismo y la ciencia ficción. Aunque hemos tenido proyectos que han estado estrechamente relcionados con la NASA, como Kerbal Space Program o Take On Mars, lo han hecho con un enfoque más educativo, mientras que Bethesda con Starfield buscó lo mismo que Owlcat: recrear entornos espaciales verosímiles, desde la gravedad hasta la interacción con los sistemas de la nave con la asesoría de científicos y astronautas.

Lamentablemente, y por muy bien que suene, The Expanse: Osiris Reborn todavía no tiene fecha confirmada de lanzamiento, aunque sí está programado para llegar, si nada se tuerce, en 2026. Así pues, por ahora solo podemos esperar.

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